El triple enfrentamiento hispano-británico marca esta semana el regreso de la Liga de Campeones, cuyos partidos de ida de los octavos de final, mañana y el miércoles, servirán para despejar dudas sobre los principales candidatos al título.

Están casi todos en una de las segundas rondas más fuertes de las últimas ediciones. Salvo el Manchester United, eliminado por primera vez en más de un decenio en la fase de grupos, y el Oporto, la relación de octavofinalistas es la prevista. Diez de los dieciséis supervivientes han levantado en alguna ocasión el trofeo y, entre todos, acumulan 36 de los 50 títulos disputados.

El Real Madrid, mañana, debe demostrar que la euforia de la última semana tiene una base sólida, favorecido por la visita de un Arsenal en horas bajas, acosado por las ausencias.

Más complicado parece tenerlo el Barcelona en Stamford Bridge, el campo en el que la pasada temporada concluyó su aventura europea.

El Villarreal, por último, acude esperanzado a Ibrox Park, porque el peor Rangers del lustro era el rival más apetecido. Además, ha vuelto Riquelme.