Caja Rioja - 79: Deforrest (5), David Mediano (17), Albano Martínez (6), Howard (13), Alberto Rodríguez (4) -quinteto inicial- Ibón Carreto (10), Molina, David Navarro (8), Sergio Soria (2) y Sidao Santana (14).
Plasencia Extremadura - 69: Dominick Martín (6), Kerry Blackshear (10), Jonathan Barceló (9), Fran Robles (12), Edward Santana (11) -quinteto inicial- Pedro Blázquez, Adolfo Santos, Nacho Fort y Kris Clarkson (21).
Arbitros: Millera y Pérez. Excluyeron por cinco faltas personales al visitante Edwar Santana.
Marcador por cuartos: 12-21, 30-37 (descanso), 55-47 y 79-69 (final).
Incidencias: Segundo partido del ´playoff´ de clasificación para la final a cuatro de la LEB Plata. Unos 1.200 espectadores en el Palacio de los deportes de La Rioja.
El Plasencia Extremadura perdió por 79-69 ante el Caja Rioja, un resultado que coloca la eliminatoria en 2-0 en un choque en el que los visitantes trabajaron más que el viernes, volvieron a dominar muchos minutos, pero, otra vez, fueron incapaces de hacerse con el mando del choque en los momentos determinantes.
El Plasencia trató durante muchos minutos de que el choque fuese diferente al de hace dos días. Probó cambios defensivos, dio protagonismo a Santana desde el inicio del partido y tuvo un buen porcentaje de acierto en el tiro (57% en tiros de dos y 29 en los triples).
Pero no fue suficiente. El Caja Rioja le superó por su profundidad de banquillo, por su capacidad para imponer la intensidad defensiva cuando más le interesó y, sobre todo, por jugar mejor en el tercer cuarto, cuando suelen decantarse los encuentros.
UN BUEN ARRANQUE El Plasencia dominó los dos primeros cuartos, con más solvencia que el viernes, gracias a que inició el partido enchufado , a que no cometió apenas errores y a que se aprovechó de que su rival se desquició por momentos.
Los triples de Robles y Barceló, junto a la consistencia en el interior de Dominick Martín decantaron el choque en el inicio ante un Caja Rioja en el que solo Howard cumplía a buen nivel.
Pero los riojanos no funcionaban en general, ni dentro ni fuera de la zona, y gracias a ello el marcador pasó del 5-10 a los cinco minutos a un 7-18 a falta de tres, gracias a dos triples consecutivos de Barceló y Robles. El Plasencia no perdió ritmo en la recta final del primer cuarto (12-21) y siguió fuerte en los siguientes minutos (12-27).
Pero su falta de físico comenzó entonces a pasarle factura justo cuando el Caja Rioja puso más intensidad en su defensa; los extremeños encajaron un 10-2 en cinco minutos que devolvió al Caja Rioja al partido y que se convirtió en más grave para el Plasencia cuando Mediano logró el punto 30-29 con un triple y una canasta a falta de un minuto y medio. Bohigas comprendió que su equipo no podía descansar , recompuso su quinteto inicial y gracias a ello pudo alcanzar el descanso de nuevo en ventaja (30-37).
Pero para entonces ya había dos cosas claras: el Plasencia no era capaz de mantener un ritmo fuerte de juego y tampoco se adaptaba bien a una defensa individual. Y, de nuevo con el mismo guión del viernes, el equipo riojano trató de sacar partido a estas circunstancias en el inicio del tercer cuarto y lo consiguió.
LUCHA ABIERTA Subió la intensidad del partido y remontó pronto gracias al acierto de Mediano en el lanzamiento y en la dirección de juego, y también al poderío de Sidao bajo los aros.
Tras igualar a 37, el Caja Rioja mantuvo su ritmo y se colocó por delante, con nueva puntos de renta a falta de dos minutos (51-42) de acabar el tercer cuarto. Desde entonces el equipo extremeño jugó obligado y por detrás en el marcador.
No obstante el Plasencia lo intentó hasta el final. Volvió a meterse en el partido con una acción de canasta y adicional de Barceló (62-59) a algo más de seis minutos para el final.
No obstante hubo otra jugada decisiva que descompensó el partido para los extremeños. Edward Santana cometió su quinta falta de forma absurda, en un innecesario empujón en un rebote, y su ausencia dejó sin un referente a sus compañeros.
No obstante, Robles empató a 62 con un triple a 5.22 del final; fue el segundo y, definitivo, momento determinante del choque, que el Plasencia, de nuevo, no aprovechó.
El acierto de Mediano y Navarro, junto a dos robos y otros tantos contraataques de los locales cerraron el choque que pasó en medio minuto de 71-69 a 77-69 y dejó sin opciones a los extremeños, que ahora se la jugarán en casa.
