ZARAGOZA: César; Ponzio, Alvaro, Gabriel Milito, Toledo (Cuartero, min.82); Zapater (Savio, min.85), Celades; Oscar (Generelo, min.82), Ewerthon, Cani; y Diego Milito.

BARCELONA: Víctor Valdés; Belletti, Márquez, Puyol, Sylvinho; Edmilson, Deco, Motta (Van Bommel, min.55); Messi (Larsson, min.70), Ronaldinho (Iniesta, min.86); y Eto´o.

GOLES: 0-1. Min.78, Ronaldinho de penalti; 0-2. Min.82, Larsson.

ARBITRO: Esquinas Torres del Comité Madrileño. Expulsó con tarjeta roja directa al local Albert Celades en el minuto 78. Amonestó con cartulina amarilla al local Diego Milito.

El Barcelona cumplió su objetivo de salir de La Romareda como mínimo con la misma ventaja respecto a sus perseguidores y se cobró algunas cuentas pendientes ante el Zaragoza, como la eliminación en la Copa del Rey, en un partido marcado por el amenaza de retirarse del terreno de juego del camerunés Samuel Eto´o, tras recibir gritos racistas desde las gradas.

La acción de Eto´o cambió un partido que, hasta ese momento, estaba equilibrado y que, tras volver al terreno de juego el delantero barcelonista, se resolvió con un penalti, convertido por Ronaldinho, la expulsión de Albert Celades y un nuevo gol del sueco Henrik Larsson tras un pase del Mejor Jugador Africano del Año.

Ambos equipos ofrecieron una primera media hora de juego absolutamente intrascendente en la que los aragoneses le cedían la posesión de la pelota a los azulgranas.

Miedo o respeto. El caso es que, después de haberse visto las caras en tres ocasiones esta temporada con un balance cualitativo favorable para los zaragocistas, el líder parecía no querer asumir el reto de tener que ganar el partido ante un adversario del que ya sabía el daño que podía ser capaz de hacerle.

Un disparo desde veinte metros de Ewerthon a los 29 minutos, tras una jugada de Delio Toledo por la banda izquierda, sirvió de detonante para que ambos equipos reaccionasen.

COMPETITIVIDAD El espíritu dormido de victoria de unos y otros dejó de estarlo y el juego cobró una mayor velocidad y la sensación de querer algo más que el empate renació, sobre todo por parte de los locales que trataban de sorprender a los barcelonistas por velocidad.

Tras el descanso, el partido mantuvo la pauta preestablecida en los primeros cuarenta y cinco minutos, con un Zaragoza que trataba de sorprender con la velocidad de Ewerthon y Diego Milito. Un córner más en apariencia a los 67 minutos, con el lanzamiento de algunos objetos y el conato de marcharse al vestuario de Eto´o por gritos racistas fueron los que terminaron desequilibrando a los zaragocistas.

El córner lo lanzó Ronaldinho y el perfecto remate de Edmilson a la escuadra lo paró Celades con César batido provocando su expulsión y el consiguiente penalti. El partido se había decantado inesperadamente hacia el lado azulgrana y sólo tres minutos después una internada por la banda izquierda de Eto´o dejó en bandeja un balón para que el recién entrado Larsson sentenciase el encuentro.