Segunda oportunidad para el Barça. Segundo partido consecutivo sin Ronaldinho --"vamos a echarle de menos", confesó ayer Frank Rijkaard, el técnico-- y ahora anda media Copa del Rey en juego. Llega hoy el Getafe al Camp Nou, "un equipo muy bien organizado, tendremos que acelerar para superarlos", según el holandés, con Bernd Schuster haciendo méritos para dejar pronto el sur de Madrid y llegar dentro de un par de meses al Bernabéu. O, tal vez, a Mestalla. "Se merece entrenar a un grande", contó Rijkaard.

Si el domingo el Barça sufrió para derrotar al Mallorca, con un autogol de Navarro y de rebote en el penúltimo minuto, hoy le toca demostrar que ha superado ese mal juego. "Será interesante ver cómo reacciona el equipo otra vez sin Ronaldinho", dijo Rijkaard a modo de desafío. Repitió prácticamente las mismas palabras que el sábado. Horas más tarde, R dio Barcelona difundía en su programa La Gradería que el brasileño sufría mononucleosis, la llamada enfermedad del beso, de carácter vírico. Veinte minutos después de que saltara la noticia en las ondas, el club emitía una nota oficial "desmintiendo que sufra esa patalogía llamada mononucleosis". El Barça, a través de sus servicios médicos, recordó que Ronaldinho trabaja desde el pasado viernes con "un plan especial" para recuperar la mejor condición física, tras "haber superado un proceso de amigdalitis que ha requerido tratamiento antibiótico".

Por otro lado, ayer Sebastián Javier, vicepresidente del Espanyol, desveló una conversación que tuvo el lunes con Laporta. "Hablé con Laporta y me dijo que el Barça le hará una oferta a la baja, seguro que en junio queda libre", explicó. Si el Valencia se lleva finalmente a Luis García, el delantero del Espanyol, Javier Saviola será prioritario en Montjuïc.