«Claro que me gustaría hacerles un favor. Favor por favor, aunque en la última jornada juguemos contra ellos y yo vaya con mi equipo». José Manuel Romero, entrenador del Amanecer de pasado, espera puntuar en Don Benito para facilitar el título al Cacereño, el equipo en el que completó buena parte de su carrera como portero, que a su vez recibe al Valdivia, rival de los de Sierra de Fuentes por abajo. La pelea por los altares y por las catacumbas. El no va más el próximo domingo en la Tercera extremeña.

Poca experiencia / «Somos los que más difícil lo tenemos», dice en tono realista un siempre diáfano Romero. «Deberíamos habernos salvado en la jornada 36, pero ahí estamos. Fallamos contra el Valdivia y contra el Arroyo». Para el técnico, si se desciende va a ser cuestión propia y de la falta de experiencia de su equipo. «Menos cuatro futbolistas, el resto vienen de juveniles o de Tercera, y eso se ha notado», añade.

Será complicado puntuar en Don Benito, para el entrenador del Amanecer la segunda mejor plantilla de la liga. «Para mí la mejor es la del Plasencia». Pero Romero tira de orgullo para no descartar resultado alguno en el Vicente Sanz. «Si no creyera en que podemos ganar, me retiraría de esto», sentencia. «Yo siempre salgo a por los tres puntos».

«Necesitamos al menos tres puntos para salvarnos», calcula, aunque si Trujillo y Arroyo pierden sus respectivos encuentros el domingo y el Mérida o el Badajoz no descienden desde Segunda B podría bastarle su puntuación actual.