REAL MALLORCA: Leo Franco; Campano, Marcos, Nadal, Poli; Novo, Lozano (Francisco Soler, min. 84), Ibagaza, Riera (Julián Robles, min. 73): Etoo (Tuni, min. 78) y Pandiani.

REAL MADRID: Casillas; Michel Salgado, Helguera, Pavón, Roberto Carlos; Makelele, Flavio; Figo, Raúl (Morientes, min. 84), Zidane (Solari, min. 70); Ronaldo (Guti, min. 79).

GOLES: 0-1, min. 6: Ronaldo; 1-1, min. 17: Etoo; 1-2, min. 47: Ronaldo; 1-3, min. 62. Raúl; 1-4, min. 64: Raúl; 1-5, min. 91: Guti.

ARBITRO: López Nieto. Expulsó con tarjeta roja directa a Pandiani en el minuto 78 por derribar a Figo. Amonestó a Lozano, Etoo y Makelele.

El Real Madrid acabó con la racha de nueve partidos invicto e del Mallorca con una espléndida exhibición de las portentosas cualidades del Fenómeno , Ronaldo, autor de dos goles claves, cada uno de ellos, al empezar la primera y la segunda parte.

Ronaldo marcó sus goles --lleva cinco en la Liga-- con una facilidad portentosa, y después le imitó Raúl, con otros dos tantos (Guti cerró la cuenta en el tiempo de descuento), que convirtieron los últimos 25 minutos del partido en un mero formulismo.

El campeón intercontinental de clubes dejó su sello personal en Son Moix, acabando de raíz con las discusiones de si le iba a afectar, o no, el jet lag de su viaje a Japón, ante un Mallorca atónito, que encajó la mayor goleada de la Liga.

Si los hombres de Del Bosque viajaron esta semana más de 30 horas para jugar y ganar en Japón al Olimpia paraguayo, no se notó, porque la carrera de Ronaldo para transformar en gol el gran pase de Raúl fue vertiginosa.

El Madrid sufrió un larguísimo apagón futbolístico en Son Moix, y de ello tomó buena nota su rival, especialmente Etoo, explosivo en el remate que cazó a dos metros de un sorprendido Casillas.

El partido pudo tomar otro cariz si el contragolpe conducido por Pandiani (min. 21), hubiese finalizado en autogol de Helguera, porque el Madrid estaba derrotado y no hubo noticias de sus delanteros hasta casi finalizar la primera parte. El Mallorca, hasta entonces, había jugado mejor y disfrutado de las mejores ocasiones, a pesar de no tener la posesión del balón, que era del Madrid sin ninguna discusión.

RONALDO, CLAVE

Otra aparición milagrosa de Ronaldo en el primer minuto de la reanudación dejó herido de muerte a los rojillos , atónitos ante la exhibición de técnica y poderío desplegada por el brasileño con la ´bicicleta´ que desequilibró, no sólo a Marcos, sino a medio estadio.

La carrera de Ronaldo y su impecable remate con su pierna izquierda fueron suficientes para determinar la diferencia que hay entre modestos ´jornaleros´ de la Liga y los superclases, que están precisamente para esto, desequilibrar apenas tienen la más mínima oportunidad.

El doblete de Ronaldo lo imitó Raúl, siempre luchador y en la boca del gol, y antes del primer cuarto de hora de la segunda parte, el Madrid ya ganaba 1-4, en un santiamén, sin otorgar la más mínima oportunidad a su hundido rival. Antes de que eso ocurriese, Casillas había salvado al Madrid con una prodigiosa intervención (min. 54) ante un cabezazo de Lozano, y el colegiado no vio un probable penalti cometido por Michel Salgado a Etoo.

Tras el 1-4, el Madrid se exhibió, jugó para la galería, a placer. Del Bosque aprovechó para dar descanso a Zidane, Raúl y Ronaldo. Los últimos minutos fueron de auténtico suplicio para un humillado Mallorca, que pasó por un trance amargo.