Ronaldo Nazario de Lima dijo ayer después de firmar su traspaso al Milan que se le "parte el corazón, pero así es la vida", en el momento de cerrar su etapa de cuatro años y medio en el Real Madrid. Eso sí, aprovechó para cargar indirectamente con el que hasta ahora ha sido su entrenador. "Solo quiero agradecer a la afición, a la gente que me ha apoyado, a todos mis compañeros y a todos los entrenadores, menos uno, que he tenido", señaló al abandonar el estadio Santiago Bernabéu, en clara referencia al actual técnico madridista Fabio Capello.

El brasileño, que permaneció menos de una hora en las oficinas del club para firmar su traspaso al Milan hasta el 30 de junio de 2008, declaró que "es triste marchar, aunque ahora tengo otro desafío importante en mi vida, que es triunfar en Milán otra vez. Me da pena porque aquí me he sentido en casa. Se han dicho muchas cosas, pero no he tenido problemas ninguna vez con el entrenador. El no me quería y yo soy un profesional. Quiero jugar, me encanta el fútbol y quería buscar otra solución", añadió.

Siete millones y medio Ronaldo, cuyo traspaso puede cifrarse en unos siete millones y medio de euros, aunque ninguno de los dos clubs hizo pública la cantidad, quiso aclarar antes de marcharse que en los últimos meses no ha hecho declaraciones a ningún medio de comunicación en contra de Fabio Capello.

"Durante tres meses no he hablado con ningún medio. Se han aprovechado y han puesto mil declaraciones en mi boca como que Capello era un demonio. De verdad ha sido muy bonito todo. Es triste por el último día, pero a partir de mañana tengo otro desafío, la vida sigue", concluyó. Luego viajó a Milán.