En el día de la confirmación del fichaje de Abidal, Sandro Rosell, exvicepresidente del Barça, aseguró que la directiva debió traspasar a Ronaldinho y Etoo, y que el fichaje de Henry, una contratación que valoró en su aspecto mediático, era demasiado caro. "Yo, no lo habrá contratado por 24 millones de euros y cuatro años. En cambio, una vez superada la revisión médica, porque esta temporada no ha estado bien físicamente por una lesión crónica, lo habría fichado por dos años y menos dinero. Hay que dar un tirón de orejas a la directiva", dijo, calificando la temporada con "un suspenso, un 4,9".

A los dos años de haber presentado su dimisión por discrepancias con Joan Laporta, el exdirigente se mostró muy crítico con la gestión de la junta. "Aún no sé quien ocupa la plaza de vicepresidente deportivo que dejé vacante. Y así no hay quien aplique disciplina. Existe una dejadez de funciones".