El italiano Valentino Rossi demostró ayer en Suráfrica, en el circuito de Welkom, que independientemente de la moto que use él es el mejor del mundo. Dani Pedrosa logró la primera gran alegría a la afición española tras ganar en 250 cc y en 125 Andrea Dovizioso se estrenó a lo grande.Valentino Rossi (Yamaha YZR M 1) consumó su venganza frente a la todopoderosa Honda de la forma más bella posible, con una victoria trabajada hasta la última curva, hasta el último metro y ante su máximo rival, el también italiano Max Biaggi (Honda RC 211 V).Sete Gibernau (Movistar Honda RC 211 V), el considerado por casi todos como el tercero en discordia en la lucha por el título mundial de 2004 no pudo hacer nada en esta ocasión y hubo de conformarse con la tercera posición a poco más de siete segundos de Rossi.No hubo lugar para la duda en ningún momento. Desde el instante en que el semáforo se apagó saltaron al escenario los protagonistas del espectáculo y estos no eran otros que el propio Valentino Rossi, Max Biaggi y Sete Gibernau, sin que el resto de pilotos pudiesen hacer nada por minimizar el vendaval de pilotaje que se les avecinó.Con el tiempo quedó claro que Sete Gibernau en esta ocasión no podría alcanzar lo más alto del podio con su Movistar Honda RC 211 V y por ello que decidiera dejar que sus rivales se fuesen y consolidar una tercera plaza que es buena tras disputarse la primera de dieciséis carreras previstas.Por delante, mucho tiempo llevó la iniciativa Valentino Rossi con su nueva Yamaha, pero en ocasiones fue Max Biaggi el que intentó cambiar el signo de la carrera y adjudicarse su primer triunfo ante un acérrimo enemigo que en ningún momento dio muestras de debilidad a lo largo de las 28 vueltas.Durante tres vueltas, de la vigésima tercera a la vigésima quinta, fue Max Biaggi quien impuso el ritmo al frente de la prueba, pero los adelantamientos resultaron entonces espeluznantes y ninguno daba muestras de querer ceder ante su rival.Sin embargo, Rossi tenía claro que no podía arriesgar a entrar segundo en la última vuelta y una antes decidió doblegar a su rival en un arriesgado interior que mantuvo las dos motos en paralelo un buen tiempo. Daniel Pedrosa (Movistar Honda) consiguió una magistral victoria en su primera carrera oficial en los 250 cc y que le sitúa líder en la clasificación provisional del mundial. Campeón del mundo de 125, Pedrosa dio el salto esta temporada al cuarto de litro y a las primeras de cambio ha protagonizado su primera victoria frente a pilotos mucho más consumados y consolidados.Aunque no hizo una buena salida, se colocó cuarto en la primera vuelta, mientras por delante se marcharon con mucha fuerza los dos pilotos que habían dominado los entrenamientos, el francés Randy de Puniet y el argentino Sebastián Porto, que cometió un error que le hizo salirse en la curva de entrada a meta cuando rodaba primero.A partir de ese momento se vivieron dos carreras, una la de la lucha del piloto de Telefónica Movistar por cazar al francés Randy de Puniet, que en esos momento rodaba en solitario y otra la del argentino Sebastián Porto, que regresó a la pista en vigesimosegunda posición y comenzó a remontar para llegar a la tercera plaza en la decimoquinta vuelta y todavía restaban once por disputarse. De Puniet vio como en la duodécima vuelta Pedrosa pasó a la acción y le sobrepasó. Su empuje le llevó al primer éxito de la temporada.El italiano Roberto Locatelli (Aprilia) fue el encargado de marca el ritmo durante todas las vueltas de carrera de 125 cc, pero fue su compatriota Andrea Dovizioso (Honda) quien en la última vuelta se adjudicó el triunfo. Pablo Nieto (Aprilia), en una carrera en constante remontada se encargó de llegar hasta el grupo de cabeza y consiguió situarse tercero, pero en el mismo sitio que Dovizioso adelantó a Locatelli el australiano Casey Stoner (KTM) hizo lo propio con él y le apeó del que hubiese sido su primer podio del año.Desde el mismo instante de la salida Roberto Locatelli, el segundo más rápido de entrenamientos, salió como un tiro, pero a su rueda se colocaron el propio Dovizioso, su compatriota Marco Simoncelli (Aprilia), que acabó cayendo, y el australiano Stoner.Locatelli fue quien impuso el ritmo de carrera y ninguno de sus rivales le metió rueda en momento alguno, hasta la última vuelta, por lo que Pablo Nieto se vio beneficiado de esa situación y del hecho de que Simoncelli en un primer momento se quedase algo rezagado y estableciese así una especie de cabeza de puente para el madrileño, que al final terminó en la cuarta plaza.