CACEREÑO 3: Alex, Antonio, Herreros, Christian, Nacho (min. 46, Juanra), Samuel (min. 46, Fran), Tomás (min. 92, Juanqui II), Lolo, Morato, Juanqui I (min. 46, José Manuel) y Rocha.

TOLEDO 1: Ramajo, Julu, Ortega (min. 85, Diego), Esteban, Miguel, Héctor, Otero (min. 59, Alberto), Carlos, Edu, Juan (min. 49, De la Haya) y Mario (min. 69, Oliver).

GOLES: 0-1: m. 3, Otero. 1-1: m. 23, Antonio (p). 2-1: m. 51, Tomás. 3-1: m. 87, Fran.

ARBITRO: Pérez Vidarte. Amonestó a los jugadores locales Herreros, Christian, Lolo y Juanqui I y a los visitantes Ramajo. Expulsó al entrenador Pedro Calvo y el masajista del Toledo.

El Cacereño dio un paso al frente para continuar militando en la máxima categoría de fútbol juvenil. Los verdes dieron continuidad ayer a su progresión hacia la salvación tras vencer en casa al Toledo, que sigue siendo el colista del grupo pero que no dio facilidades. Los de Sergio Lajas superaron al cuadro toledano por 3-1, a pesar de comenzar perdiendo ya en el minuto 3.

Un saque de esquina cuando el partido acababa de inaugurarse trajo el primer revés para los locales. Otero botó un corner y el balón se coló directamente en la portería defendida por Alex. El tanto desangeló a los verdes.

El cuadro visitante trabajaba por abortar las ofensivas del rival a base de presión sobre las líneas de pase. La fórmula le daba el fruto esperado, ya que el Cacereño hallaba excesivas dificultades para pisar el área.

En una de las primeras internadas, el colegiado castigó con penalti un contacto de un defensa sobre Lolo cuando menos discutible. Antonio acertó a empatar desde los once metros.

El primer tiempo finalizó con las espadas en todo lo alto. Ya en la segunda parte, Tomás adelantó al Cacereño en una jugada individual con un bonito dribling sobre el portero visitante. Era el minuto 51 y el partido había girado su destino.

Era el once de Lajas el que marcaba la pauta a seguir sobre el césped. Rocha envió un cohete desde el centro del campo aprovechando que el portero estaba adelantado que casi alunizó en las mallas.

El propio delantero tuvo otra oportunidad para aumentar la renta y poder respirar. Pero ese honor lo tuvo Fran, ya en el 87. Los visitantes reclamaron un posicional fuera de juego de Rocha. Tras el tanto, una tangana entre jugadores de los dos equipos acabó con el encendido entrenador visitante, Pedro Calvo, y el masajista en las casetas antes de tiempo tras ver sendas cartulinas rojas.