El Real Madrid prepara con calma la final del Mundial de Clubes en lo deportivo, confiado en la presencia de Sergio Ramos en la final y con una duda por despejar en el centro del campo, mientras el club asiste con sorpresa a la duda de FIFA sobre la elección del colegiado que pitará ante San Lorenzo.

Cuando todo parecía decidido y el portugués Pedro Proença sería el elegido, las palabras del presidente de San Lorenzo quejándose de la cercanía del país de procedencia del colegiado y recomendando al chileno Enrique Osses como idóneo han provocado un revuelo antes de que se haga oficial la decisión.

DUDAS "No tienen claro todavía el tema del árbitro", admitió el presidente Marcelo Tinelli. "Parece que el portugués es el favorito. Me parece raro que sea del mismo continente. Si me dicen que es el mejor está bien, a mí el chileno me parece un árbitro excelente y técnicamente no me gustaría otro porque pitan cosas que en Sudamérica no estamos acostumbrados a que se señalen", añadió.

En la cabeza de Ancelotti solo está el partido y tras estudiar la pobre imagen ofrecida por San Lorenzo en su semifinal ante el modesto Auckland City, el italiano ya ha comenzado a señalar los puntos débiles del rival.

Sigue sin poder contar con Sergio Ramos, más por precaución que por importancia del percance muscular que le hizo pedir el cambio ante Cruz Azul. En los planes del segundo capitán está ejercitarse hoy con sus compañeros.

Ancelotti tiene su equipo decidido y sólo parece bailar una demarcación: el jugador que acompañará a Toni Kroos e Isco en el centro del campo. Illarramendi ha dado el salto de calidad que se le demandaba cuando ha tenido continuidad, pero James Rodríguez y Sami Khedira, saliendo de lesiones, aspiran a su puesto.

El juego que aporta al Real Madrid mejora al equipo pero la decisión final no llegará hasta pocas horas antes de una final que todos están convencidos de ganar.