El Extremadura ha sido multado con 600 euros por la Federación Extremeña al no resolver el finiquito del anterior técnico del filial, Óscar de Paula, hecho que le impide inscribir al técnico actual, Ricardo García. De Paula denunció su contrato tras ser despedido el 14 de octubre y el Extremadura tuvo 15 días para abonar su finiquito. No se produjo tal hecho y el Comité de Jurisdicción acordó la readmisión de De Paula en el club. Este hecho tampoco se ha cumplido y se le dio un plazo para abonar el finiquito. Al transcurrir la primera semana sin hacerse efectivo el pago, la multa es de 600 euros. Una hipotética semana más acarrearía otra multa de 1.200 euros. Y así sucesivamente. Lo más grave es que si el viernes no hubiera abonado la cantidad que se le debe a De Paula, se le suspenderían los derechos federativos y el club no podría fichar. Esto se debe a la protección con la que cuentan los técnicos en estos casos.