El alcalde de Cáceres, José María Saponi, insiste en que el Cacereño "es el club más emblemático y representativo de la ciudad" y que no tiene nada que reprochar "a nivel individual" al presidente, "ni al entrenador y mucho menos a los jugadores que integran la plantilla". Así lo expresa en un comunicado hecho público ayer por su gabinete de prensa, en el que tiende la mano al máximo responsable del club, Felix Campo, a quien dice estar dispuesto a recibir.

"No nos han hecho ni caso", reiteró ayer el vicepresidente del club, Juan Ojalvo, sobre las relaciones con el ayuntamiento y una solicitud de entrevista cursada desde hace varios meses. El alcalde dice que "no existe una petición formal" al respecto, al tiempo que manifiesta que sólo hubo una llamada telefónica y "numerosas reuniones de trabajo y encuentros" con el club por parte del concejal de Deportes, Lázaro García, en quien ha delegado el propio Saponi.

Mientras tanto, en lo estrictamente deportivo, Ojalvo aseguró ayer que el entrenador del Cacereño, "le ha cantado las cuarenta" a los jugadores tras el 0-3 ante el Monesterio. Esta tarde será el directivo quien exponga el malestar a la propia plantilla.