El piloto alemán de Ferrari, Michael Schumacher, admitió tras el Gran Premio de Gran Bretaña, en el que terminó sexto, que este año su equipo no está alcanzando un nivel suficientemente competitivo para defender el campeonato del mundo.

En declaraciones recogidas en la página web de la BBC, el piloto se mostró desolado por los últimos resultados cosechados: "En las últimas carreras hemos retrocedido en lugar de progresar. Tenemos que admitir que no somos lo suficientemente buenos".

Schumacher, que marcha 34 puntos por detrás del líder, el español Fernando Alonso, explicó que el problema "no era que el coche fuera mal, sino que no era lo suficientemente rápido. Fuimos un poco lentos en los preparativos a principio de temporada, y luego tuvimos que dejar de lado el desarrollo del coche debido a las necesidades de la competición, por eso hay aspectos menos desarrollados de lo que debieran", explicó el piloto que se pese a todo se mostró tranquilo: "Estoy calmado. Ni contento ni triste. Es sólo un periodo por el que hay que pasar. Puedo vivir con ello", apuntó, y dijo que, pese a todo, hay que ser optimista en esta vida.