Está siendo la semana más larga de mi vida. Como trabajador, estoy deseando que llegue el fin de semana pero también, como suele ocurrir, los domingos siempre piensas en que no quieres que llegue el lunes; en este caso sí deseo que llegue ya". La reflexión corresponde a Juan Francisco Luis, presidente del Cáceres, que aguarda con impaciencia la llegada del día 21, en el que la Federación Española decide si el club juega en la LEB.

Como Juan Francisco Luis, están en estos días el resto de personal del club, todos los que trabajan a diario: Julio Espino, el gerente; Goyo, el contable o la administrativa, Julia, que son los que más tiempo pasan en el club, además de Luis y el entrenador, Ñete Bohigas. "No me siento agobiado, ya que tengo espíritu peleón, pese a que este compás de espera nos tenga parada la campaña de socios y la iniciativa de contactar con las empresas".

El optimismo, dice el presidente, es absoluto. "Yo estoy convencido de que tenemos el 100 por 100 de posibilidades de que tendremos una plaza", afirma con seguridad. Ni quiere pensar en no ser admitido. "Eso es ciencia ficción", añade.

ASESOR DE CONFIANZA

Y es que Luis tiene una "confianza total" en Basilio Hermoso, secretario y asesor jurídico del club. "Contamos con asesoramiento de lujo y a mí me da una gran seguridad", apunta.

El recurso está en Madrid. Y el lunes, a partir de las cuatro y media de la tarde, habrá decisión. El día siguiente dan por seguro que viajarán para el sorteo. Y el Cáceres quiere, dice su presidente, "conocer ya al primer rival".