La estadounidense Serena Williams ha ganado a su hermana Venus en la final del Open de Australia celebrada en Melbourne. Con este título, la pequeña de las Williams se proclama campeona del Open de Australia por séptima vez en su carrera.

La pequeña de las Williams, de 35 años, se ha impuesto sin ceder un solo set, por 6-4, 6-4. Con este resultado recupera el puesto de número uno del mundo. La tenista rompe la igualdad que mantenía con la alemana Steffi Graf y figura ahora con 23 Grand Slams, a un solo título de Margaret Court.

Todo ello, en 88 minutos de en una final pobre en cuanto a juego, y que acabó con 46 errores no forzados, 25 de ellos para Venus.