Sergio García cumplió su misión en la penúltima ronda del Volvo Masters: cazó al líder, el escocés Colin Montgomerie, para compartir ambos la vanguardia del último torneo en Europa que se juega en Valderrama (Cádiz).

Bajo unas condiciones idílicas para jugar al golf pero nefastas para el acecho a un líder sólido como era Montgomerie, con sol, calma chicha y greens blanditos, García, un joven español de 25 años, sexto del mundo y osado por la seguridad que le proporciona su swing, atrapó al que era el máximo protagonista de este último capítulo del Tour. García y el agua del hoyo 17, a donde fue a parar la bola de Monty, se tragaron al hasta ahora líder pétreo del torneo.

El protagonismo aparece ahora repartido. La batalla final se centra, pues, en estos dos hombres, diferenciados ya en Valderrama sólo por la edad (17 años), experiencia (Monty ha jugado las 18 ediciones del Volvo Masters) y palmarés en Europa (el escocés tiene 22 títulos más).

Sólo una catástrofe podría dar opciones al cuarteto que les sigue en la tabla a cuatro golpes, formado por el irlandés Paul McGinley, y los ingleses Broadhurst, Westwood y Poulter.