El Sevilla, que trae un 3-2 adverso del partido de ida de los octavos de final de la Liga de Campeones que disputó en Estambul frente al Fenerbahce, espera hacer valer ahora el factor campo para meterse en los cuartos, para lo que le sirve, entre otros resultados, el 1-0.

El equipo de Manolo Jiménez saboreó por momentos el empate a dos que hace dos semanas campeaba en el estadio turco, pero un tanto de Semih Sentürk en el minuto 87, poco después de ingresar al campo, obliga al Sevilla a ganar en el Ramón Sánchez Pizjuán.

Para ello, el club español ha confeccionado una serie de actividades festivas con la que dar colorido antes y durante el partido y para el que el equipo se vea arropado en este choque y eso ayude a la victoria.

En los turcos no jugará Roberto Carlos, su estrella. El técnico, Zico, afirmó ayer: "El Sevilla es el mejor equipo del mundo".