El Sevilla FC buscará ante el Slavia de Praga, un lobo vestido de "caperucita", el bálsamo a sus males de los cuatro últimos partidos -ante Barcelona, Español y Zaragoza, y Arsenal, en Liga de Campeones- en su segundo partido del Grupo H de la competición continental.

Pese a esta racha adversa, el equipo que dirige el técnico Juande Ramos quiere asirse a los argumentos que le dan como favorito, tanto en las apuestas, como en las estadísticas de las dos últimas temporadas en competición europea, con tan solo una derrota en catorce partidos disputados.

Juande Ramos recupera a dos de los tres jugadores que estaban "tocados" para el partido del Slavia: el ruso Kerzhakov -recuperado de su lesión de tobillo- y Boulahrouz, jugador cedido por el Chelsea, que también se ha recuperado de una contusión en el tobillo izquierdo.

Sólo Javi Navarro y Maresca -a éste le falta al menos una semana para recuperarse de su elongación muscular- se ausentan por lesión de una lista a la que vuelven Kerzhakov, Duda y Escudé, y de la que salen, con respecto a los que viajaron a Zaragoza, Fazio, Mosquera y Diego Capel.

El Slavia, que dirige Karel Jarolim, puede acogerse al calificativo de lobo vestido de caperucita por su marcha desde su fulgurante irrupción en la Liga de Campeones. Su primera e inesperada víctima fue el poderoso Ajax de Amsterdam, al que eliminó en la fase previa, para luego batir al Steaua de Bucarest (2-1) en la primera jornada, mientras que en la Liga checa el Zlin pagó (7-1) su preparación ante el choque con el Sevilla.