Sevilla: Esteban; Sergio Ramos, Pablo Alfaro, Aitor Ocio, David; Daniel Alves, Renato, Martí (Pablo Ruiz, m.89), Jesuli (Jesús Navas, m.86); Julio Baptista y Antoñito (Carlitos, m.52).

Athletic de Bilbao: Aranzubía; Iraola, Prieto, Murillo, Casas (Del Horno, m.79); Gurpegui, Orbáiz; Etxeberría, Tiko (Yeste, m.58), Ezquerro; y Urzaiz (Azkorra, m.64).

Goles: 1-0, M.53: Julio Baptista. 2-0, M.66: Carlitos.

Arbitro: Carlos Velasco Carballo (Comité madrileño). Amonestó al local Antoñito y a los visitantes Murillo, Gurpegui y Casas.

Incidencias: Partido disputado en el estadio Sánchez Pizjuán ante 40.000 espectadores. Terreno de juego bien.

El Sevilla sigue intratable en el Ramón Sánchez Pizjuán, donde sólo ha cedido un empate, ante el Mallorca, en sus siete partidos de Liga disputados como local, y en esta ocasión superó con mucha claridad y suficiencia a un Athletic de Bilbao que demostró el porqué sólo ha sumado un punto fuera de San Mamés.

El partido fue un monólogo del conjunto local desde el inicio ante un rival que pudo salir goleado y ya antes de cumplirse el primer minuto el brasileño Renato estuvo muy cerca de inaugurar el marcador tras pase de su compatriota Julio Baptista.

Los sevillistas dominaron en el centro del campo e intentaron jugar por las bandas ante un Athletic que perdió con facilidad el balón y que creó poco peligro pese a que Ezquerro, Etxeberría y Urzaiz estuvieron muy adelantos pero siempre superados por los defensores locales.

La segunda parte empezó muy activa por parte de ambos conjuntos, con llegadas a una y otra portería, pero fue el de siempre, Julio Baptista, el que se fabricó un auténtico golazo desde fuera del área.

Se habían disputado ocho minutos de la reanudación y no tardó mucho Valverde en dar entrada a Yeste y a Azkorra para buscar mas creatividad ante la necesidad de encontrar un gol, pero fue Carlitos, que también salió en la segunda parte, el que definió muy bien y puso el 2-0 final.