Wayne Simien, pívot norteamericano del Cáceres 2016, fue agasajado en la mañana de ayer en el IES Luis de Morales, de Arroyo de la Luz, donde habló con los alumnos, firmó numerosos autógrafos y se prestó a hacerse fotos con todo aquel que se lo requirió. El jugador ejerció de ídolo y se confirmó como el rostro de referencia actual en el club de baloncesto. "Si tienes un sueño, tienes que trabajar duro para conseguirlo. Lo más importante es rodearte de gente buena a tu alrededor que te ayude a lograrlo", les dijo a los jóvenes. Sus compañeros Tomás Bellas y Juan Sanguino visitaron el Colegio Sagrado Corazón, de Cáceres.

Por la tarde, intensa preparación sin novedades del partido de mañana frente al Ciudad de La Laguna.