Un grupo de compromisarios del Barcelona presentó ayer en los juzgados una querella contra los expresidentes Joan Gaspart y Enric Reyna y el extesorero Ramón Salabert, a los que acusan de un presunto delito societario, y piden que se aclare el destino de 25 millones de euros del club.

La querella fue presentada en los juzgados de instrucción de Barcelona por el socio compromisario que representa a ese grupo, Robert Blanch, quien, a preguntas de los periodistas, ha desvinculado esta iniciativa de la campaña electoral a la presidencia.

Esta querella se suma a la demanda civil presentada hace unos días en los juzgados de la ciudad y en la que se pide, entre otras cosas, que se anule la operación de venta de unos terrenos del club situados junto a la finca donde se ubicará la futura ciudad deportiva del Barcelona.

En la querella contra Gaspart, Reyna y Salabert, se imputa a los denunciados un presunto "delito societario en su modalidad de falsedad contable" ya que acusan a la antigua cúpula directiva de la entidad de "maquillar" las cuentas del Barcelona para aparentar un superávit cuando en realidad había déficit.

La denuncia alude a la venta a una constructora de 100.000 metros cuadrados de terrenos aledaños a la futura ciudad deportiva, operación que las directivas de Gaspart y Reyna "hicieron pasar como una venta cuando en realidad era una permuta".

DOS FASES

Según la querella, la directiva dividió la operación en dos fases para no tener que someterla a la aprobación de la asamblea de compromisarios del Barcelona, que debe actuar en toda operación que supere el 20% del presupuesto de la entidad.

La querella señala que los ex directivos del FC Barcelona hicieron constar los beneficios de la operación como extraordinarios cuando la normativa prohíbe tratar beneficios de una permuta.

"Esta contabilización de un beneficio extraordinario es una falsedad de la realidad contable (...) lo que da lugar a una situación económica del club radicalmente diferente pues de una situación contable de ganancias se pasa a una situación real de pérdidas", señala el texto de la querella.

Los denunciantes aseguran que Gaspart y Reyna hicieron constar como beneficio extraordinario del ejercicio 2001/2002 unos 25 millones de euros.