Esta vez sí. Esta vez Sergio Clemente y Pedro Rocha sí jugarán el Mundial de Fútbol 7 con España. Será a partir de hoy en Brasil. Hace cuatro años no pudieron hacerlo en Argentina porque la Federación Española de Paralíticos Cerebrales alegó falta de fondos para poder pagar el desplazamiento y la concentración del equipo.
Los extremeños se quejaban entonces amargamente en este diario de la imposibilidad de disputar el campeonato con España, entre otras cosas, según la federación y añadiéndolo a los problemas económicos, a las pocas posibilidades de hacer un buen resultado, lo cual enervó aún más a los dos deportistas cacereños.
Rocha y Clemente están cerca de las 100 internacionalidades, una cifra que tiene mucho mérito teniendo en cuenta que son los únicos que no pertenecen a equipo alguno --en Extremadura no hay competición de fútbol 7 para su dispacidad-- y a que ambos son estudiantes. Rocha, de 27 años y un 35 por ciento de discapacidad, mediocentro, está a dos asignaturas de terminar Biología, y el punta Clemente, con 10 por cien de minusvalía, también sigue estudiando con 24 años y un futuro por delante.
El campeonato está organizado por la Asociación Internacional de Deporte y Ocio para Paralíticos Cerebrales (CPISRA) y la competición se estructura en dos fases que serán una liguilla y una fase final.
En la liguilla participarán cuatro grupos de cuatro equipos cada uno y los españoles jugarán en el grupo 1, que engloba las selecciones de España, Irán, Holanda y Estados Unidos.
Desde hoy
Así, el conjunto español se enfrentará hoy a la selección iraní, el miércoles se medirá a la de Holanda y el viernes jugará frente a Estados Unidos. En el grupo 2 jugarán los equipos de Brasil, Australia, Inglaterra y Sudáfrica, en el 3 jugarán los de Ucrania, Irlanda, Canadá y Japón, y en el 4 las selecciones de Rusia, Argentina, China y Escocia.
A la segunda fase del campeonato accederán los dos mejores combinados de cada grupo y los cuatro países que disputen las semifinales lograrán, además, la clasificación automática para los Juegos Paralímpicos de Pekín 2008.
La expedición la forman 12 futbolistas, junto con el seleccionador, el preparador físico, un fisioterapeuta y un traductor. Ahí están los extremeños, queriendo hacer historia.
