Terminó el partido, pese a todo, pero él mismo cuenta que no se encontraba bien en los 25 minutos posteriores al tremendo golpe que se dio en una jugada fortuita con un delantero algecireño y su compañero, el portero Félix Campo.

Xavier Pelegrí, defensa del Cacereño, vivió sus peores momentos justo después de terminar el partido. "Me sentí muy mareado", contaba ayer por la tarde desde una habitación de la clínica San Francisco. Había pasado ya el susto y las pruebas que se le practicaron sólo arrojaron un pequeño hematoma producto del golpe. En unos minutos esperaba recibir el alta porque ya se encontraba totalmente recuperado. "Fue un sustillo que se ha quedado en nada", añadía el joven jugador catalán, sin duda uno de los jugadores clave en el actual liderato del Cacereño.

La noche la había pasado Pele , como le llaman en el vestuario, en la clínica cacereña porque, según los médicos, "era mejor que estuviera en observación". Por la mañana le visitaron el técnico, Ismael Díaz, el director general, José Ignacio Aguinaga, y sus compañeros.

OTRA VEZ PROBLEMAS

Pele estará el domingo ante el Málaga B, al igual que los también centrales Guy y Jurado, que terminan su sanción, en el caso del último de cuatro encuentros.

"De tranquila nada", dicen en el Cacereño sobre la semana. Y es que se preveía que ésta fuera de recuperación de jugadores. Pero el capítulo de bajas vuelve es amplio: ayer no entrenaron Nacho Garrido, Tariq y Pedro García, por distintos problemas físicos.

Aún deben esperar al menos dos o tres semanas, según los cálculos del entrenador, Caballero, Maxi o Sema. Al menos ya hacen los primeros ejercicios. Pero, como cada siete días, el parte médico del líder del grupo IV de Segunda División B no está vacío.