IURBENTIA BILBAO BASKET: Huertas (18), Paco Vázquez (8), Recker (-), Banic (12) y Weis (2) -cinco inicial-; Salgado (11), Lewis (8), Savovic (4), Rancik (4), Pasalic (4) y Xabi López (2).

TAU VITORIA: Planinic (14), Rakocevic (23), Jasaitis (13), Singleton (-) y Splitter (16) -cinco inicial-; Prigioni (12), Lucho Fernández (1) y Teletovic (6).

ARBITROS: Arteaga, De la Maza e Hierrezuelo.

MARCADOR POR CUARTOS: 19-24, 37-50 (descanso); 56-68 y 73-85 (final).

El Tau logró ayer su tercer título de la Supercopa ACB al imponerse al Iurbentia Bilbao Basket en la final por 73-85, un resultado que reflejó con claridad lo ocurrido sobre la cancha.

El equipo vitoriano, campeón de nuevo a costa de un equipo local, solo se dejó sorprender por su vecino rival en los primeros instantes del encuentro, cuando el Iurbentia se puso 6-2, pero después dominó concierta holgura gracias, sobre todo, a su talento en ataque.

Como ayer ante el Real Madrid, fue Pablo Prigioni el que llevó la manija del partido, apareciendo cuando lo consideraba oportuno para enfriar los ánimos del esforzado equipo bilbaíno y su entregada afición.

No obstante, quizás fuese Tiago Splitter, justamente recompensado con el MVP del torneo, el que más hiciese para erosionar la resistencia local. El pívot brasileño martilleó el aro rival durante una primera mitad, en la que él solo acabó con los mismo puntos de valoración que todo el Iurbentia, 21.

SIN OPOSICION Rakocevic pareció haberse animado con su triunfo en el concurso de triples y se marcó uno de esos pletóricos choques que completa cuando tiene el día de cara. También Planinic estuvo a gran altura, Teletovic logró dos triples muy valiosos y hasta Jasaitis se sumó a sus compañeros.

Al Tau le bastó con darle protagonismo a seis jugadores, porque Singleton se lesionó tras una aparatosa caída en un salto en la zona y McDonald no pudo jugar por no estar claro el asunto de su matrimonio por el que obtuvo el pasaporte español.