Es verdad que todos los caminos llegan a Roma y, aunque hay muchas opciones de completar el trayecto, lo importante es no salirse nunca del camino y llegar a la meta con el reto planteado. El fútbol extremeño de Segunda B se prepara para un último mes y medio trepidante. Villanovense y Mérida ya se han posicionado estratégicamente para alcanzar el play off de ascenso y lograr una hazaña que hace décadas que el fútbol extremeño no ve: colar a dos equipos de la región en la fase de ascenso. Por abajo, el Extremadura ha salido de la UVI gracias a una medicina capaz de curar cualquier enfermedad deportiva: una afición de bandera. Sigue en planta, en promoción para la permanencia, pero la muerte del descenso está algo más lejos.

Si Roma es el destino, cada uno ha elegido llegar a su meta a través de un medio distinto. El Villanovense ha puesto regulador de velocidad y se ha convertido en el equipo más regular de la liga. Así lo refleja la tabla, donde es tercero. Ha estado siempre de la mitad hacia arriba y salvo la crisis de inicios del 2017, su fiabilidad siempre ha sido la tónica predominante. Ante el Melilla volvió a demostrar su potencial defensivo y por qué es el segundo menos goleado del grupo (sólo 27 goles en contra).

Se puede decir que el Villanovense es el único que, al menos, ha logrado el primer gran objetivo de la temporada que era salvar la categoría. Su permanencia ya es matemática, aunque ese objetivo camuflado se antojaba corto para todos. Su calendario le depara dos enfrentamientos directos con equipos de su pelea. Tendrá que recibir al Cartagena, en su última bala por el segundo puesto, mientras que deberá visitar Marbella, su precipicio al cuarto lugar. Dos partidos con doble filo. El resto son todos de la zona media baja (Granada B, San Fernando, Jaén y Sanluqueño). Se dice que ganando los de casa y el último en Sanlúcar podría estar asegurada la fase de ascenso, según las cuentas de otros años.

enérgico/ El Mérida, como el Extremadura, han preferido más las emociones fuertes que la velocidad media. Sus temporadas son dos auténticas norias que están pulverizando los corazones de sus aficionados.

Con su goleada ante la Balompédica Linense, el Mérida ha recortado cuatro puntos a sus cuatro rivales directos en la lucha por dos puestos de play off. El Mérida ha logrado 20 puntos en la segunda vuelta, siendo el cuarto mejor equipo de la segunda parte del campeonato. Está encontrando el gol con facilidad y no es fácil meterle mano en parcela defensiva, especialmente desde la llegada a la portería de Jabier Mandalúniz.

Eloy Jiménez ha repetido, por activa y pasiva, que desde que llegó al Romano ha visto que sus jugadores le transmiten «algo especial» y en esa buena onda se apoya todo el Mérida, que ahora afronta el calendario factible de la temporada. El club va a movilizar a los suyos para un viaje organizado el sábado al Nuevo Colombino de Huelva, su próximo desembarco.

entregado/ Y el caso más revolucionario es el del Extremadura, moribundo a finales de diciembre y con más que vida a mes y medio para que se acabe el cuento. Su victoria en Granada le permite ser el tercer mejor equipo de la segunda vuelta de la liga, sólo superado por Lorca y Recreativo de Huelva. «Nuestro mayor tesoro es la gente, que nos está llevando en volandas», dijo ayer Manuel Franganillo cuando presentaba el partido del domingo (18.00 horas) ante el San Fernando, un envite que ha catalogado como «el más importante de nuestra historia».

El Extremadura ha pasado de tener 1.500 espectadores en la gradas a pasar cada domingo de los 7.000. La victoria en Armilla, con una legión de medio millar de valientes azulgranas, ha disparado de nuevo la moral de una afición entregada a su equipo como hacía años que no se recordaba. Algunos de los socios más antiguos han llegado a declarar que la situación le recuerda a aquel CF Extremadura que peleó hasta el final por permanecer en Primera División, «aunque esperemos que con resultado contrario», decía.

El Francisco de la Hera volverá a rozar la impresión de lleno el domingo, un partido que el club dedicará al voluntariado de las oenegés y asociaciones que operan en Almendralejo. Dará entrada gratis en fondo norte a aquel que entregue durante la semana un kilo de comida en las taquillas. Cada abonado podrá sacar también una entrada gratis. La fiesta está asegurada.