Mucho se está hablando estos días de la situación de algunos componentes de la plantilla del Cáceres 2016. Son jugadores que están disfrutando de pocos minutos y como consecuencia, de pocas oportunidades de ayudar al equipo. Siempre es difícil que todos los miembros de un grupo gocen de los mismos minutos y tengan la misma importancia en el juego, especialmente cuando se tiene una plantilla de doce jugadores. Depende del entrenador y de su criterio el contar con más o menos deportistas, aunque no muchos suelen usar más de nueve. Esto hace que dos o tres deportistas no hagan lo que más le gusta: jugar. Cuando un profesional se encuentra ante esta situación (yo he estado en ella alguna vez) suele sentirse frustrado, incomprendido y desorientado. Se tiende a no asumir la culpa propia y buscar la excusa en los demás.

Ante esta situación se puede actuar de dos maneras diferentes. La primera es bajando los brazos, enfadándote con el mundo y "dejándose llevar" como diría Andrés Montes. La segunda es seguir trabajando, luchando por demostrarle al entrenador cada día que puede confiar en ti y prepararse para cuando llegue la oportunidad poder aprovecharla. La temporada es muy larga y se pueden dar multitud de situaciones y al final todos los jugadores tienen su momento. La clave reside en estar preparado para aprovecharlo, y a eso sólo se llega por el camino del trabajo y la constancia.

Un ejemplo de lo que hablo es mi compañero y amigo Juan Sanguino en la temporada anterior. No disfrutaba de minutos y se vio relegado al fondo del banquillo y a no disfrutar de minutos en varios partidos seguidos. Lejos de hundirse, siguió trabajando y esforzándose para cuando le llegara su oportunidad. Le llegó cuando Wayne Simien se marchó y Adrian Moss estaba lesionado. Gracias a su trabajo previo y su esfuerzo, supo aprovechar su oportunidad, realizando un sensacional final de temporada.

Animo a los jugadores de nuestro equipo que atraviesan esta difícil situación a tomar a Juan como ejemplo para preparase para cuando su oportunidad llegue.