PLASENCIA: Tony Tate (17), Francis Perujo (2), Jorge Lledó (13), Ville Kaunisto (8) y Nigel Wyatt (5) --quinteto inicial--, Alberto Rodríguez (4), Javi Salsón (11) y Roberto de la Rosa (9).

AXARQUIA: Víctor Rojas (3), José Antonio Rojas (8), Tello Galloway (15), Pavel Ermorinski (19) y Paulao Prestes (17) --quinteto inicial--, Dani Romero (3), Jesús Pineda (1), Maxim Cheburov (0), Vilmas Vilys (6) y Jesús Lázaro (2).

ARBITROS: Labrac Naranjo y Madrid Soler. Eliminaron por cinco faltas personales al local Javi Salsón (36´).

MARCADOR POR CUARTOS: 17-18, 36-39 (descanso), 55-60 y 69-74 (final).

El Plasencia cerró el año con una nueva derrota ante su público en un partido vivo, igualado y trepidante, en el que al final se impuso el Clínica Rincón Axarquía por 69-74. Los locales entraron en los últimos dos minutos con seis puntos de ventaja tras remontar al filial malacitano hasta diez puntos de diferencia.

El choque fue intenso desde los primeros compases, con defensas muy agresivas en las que destacaba el duelo entre Paulao y Kaunisto, que se rompió pronto al cometer el placentino su segunda falta personal. El dinamismo y el entrenamiento eran protagonistas, a lo que no se añadió el arbitraje, muy flojo durante todo el encuentro.

El segundo cuarto comenzaba con 17-18 y sin referente ofensivo en el bando local, facilitando la anotación cómoda visitante. Se llegaba al descanso con 36-39 y con Paulao y Ermolinski como los hombres más destacados.

Tras el descanso el Axarquía empezó a marcar diferencias merced al flojo balance defensivo placentino y a la falta de ideas y la precipitación en el ataque. Se llegaría al último cuarto con los de Déniz por debajo (55-60).

Sin embargo, se crecieron los jerteños e superarían a su rival (67-63) y disponiendo de tres ataques consecutivos para sellar el partido, pero la falta de experiencia argumentada por Déniz tras el partido y la nefasta estadística desde el tiro libre impidieron finalmente la victoria, que se fue definitivamente para tierras malagueñas, dejando el balance en negativo en la tabla clasificatoria, en la que los placentinos pierden posiciones.