BEIJING GUOAN: Yang Zhi, Zang Shuai, Sui Dongliang, Yang Pu, Yan, Xianghuang, Xu Yunglong, Tao Wei, Huang Bowen, Pantelic y Zhang Yonghai.

BARCELONA: Jorquera (Oier, m.45), Zambrotta (Marc Crosas, m.66), Oleguer (Marc Valiente, m.82), Thuram, Abidal (Sylvinho, m.45), Xavi Hernández (Dimas, m.86), Toure (Motta, m.45), Iniesta (Olmo, m.78), Giovani (Ezquerro, m.74), Eto´o (Maxi López, m.70) y Henry (Ronaldinho, m.45).

GOLES: 0-1, min.8: Giovani. 0-2, min.57: Iniesta. 0-3, min.77: Ronaldinho.

ARBITRO: Sung Baojie.

El Barcelona se estrenó con una victoria (0-3) ante el Beijing Guoan en la gira asiática que comenzó el pasado jueves y mantiene así la línea de éxito que cosechó en la anterior concentración en Escocia, donde se impuso al Dundee United (0-1) y al Hearts (1-3).

El marcador lo inauguró el joven mexicano Giovani dos Santos cuando tan sólo habían transcurrido ocho minutos de partido, tras culminar una asistencia de Xavi Hernández.

La escasa entidad del rival conllevó un dominio absoluto del Barcelona, que encadenó ocasiones protagonizadas especialmente por Thierry Henry.

El brasileño Ronaldo de Assis Ronaldinho se quedó de inicio en el banquillo, con su alineación en duda por las molestias que sufría en el tobillo, pero el técnico Frank Rijkaard decidió darle entrada en la segunda mitad.

Ronaldinho reclamó pronto la atención, aunque el Beijing Guoan tuvo antes una clara ocasión en un balón al palo que envió Tiago cuando intentaba superar al canterano Oier.

El 0-2 fue obra de Andrés Iniesta, a quien el camerunés Samuel Eto´o le sirvió el tanto en el minuto 57, y el partido entró en una fase para el lucimiento de Ronaldinho.

La estrella brasileña demostró que está recuperado de las molestias en el tobillo al transformar con el pie dañado una falta directa en el minuto 77 que establecía el marcador definitivo.

DELIRIO EN PEKIN Bastaron unos pocos toques de jogo bonito de Ronaldinho para que los 33.000 aficionados pequineses disfrutaran de lo lindo en el partido y dedicaran una ovación al astro brasileño.

El brasileño fue elegido el mejor jugador del partido, y recibió un enorme trofeo al final del encuentro por este motivo, llevándose el aplauso de los agradecidos espectadores.

Las gradas animaron a los dos equipos a la vez, hicieron la ola, se abstuvieron de lanzar insultos -ante la advertencia policial de que habría detenidos si emitían juramentos- y hasta hubo quienes se pasaron los 90 minutos ondeando banderas blaugranas.

El público también agradeció el gesto de los jugadores barceloneses al principio del partido, cuando salieron al campo portando una pancarta en caracteres chinos en la que deseaban a la capital pequinesa que tenga éxito en la organización de los Juegos Olímpicos 2008. No en vano, el partido amistoso es el plato fuerte de los actos deportivos que estos días se celebran en Pekín para recordar que queda sólo un año para la cita.