Túnez y Arabia Saudí se enfrentan hoy por la condición de aspirantes a la sorpresa en el grupo H, en el que España y Ucrania son favoritas.

El único duelo árabe que puede darse en el Mundial, salvo que los dos se clasifiquen, enfrenta al único técnico que se ha proclamado campeón de Europa y de Africa, el francés Roger Lemerre, frente al único que ha sido campeón del mundo dos veces en el mismo año, Marcos Paquetá, vencedor con los sub-17 y sub-20 brasileños en el 2003.

Es un partido decisivo para ambos, que se exponen a dejar el Mundial sin victoria alguna, si fallan en su debut. En caso contrario, sin embargo, podrían gestionar un buen comienzo para tratar de dar la sorpresa.

Para Arabia Saudí, significa, además, la ocasión de romper su mala racha en los primeros partidos de un Mundial, porque perdieron en las tres ediciones anteriores en las que participaron (1-2 ante Holanda, en Estados Unidos-94, 0-1 contra Dinamarca en Francia-98 y 0-8 frente a Alemania, en Corea-Japón 2002).

Marcos Paquetá, alistado en enero después de que no le convenciese el trabajo del argentino Gabriel Calderón a los jeques saudíes ha hablado a sus jugadores del espíritu del 94 y se pone como ejemplo el trabajo de Guus Hiddink con Corea en el 2002.

Más problemas tiene Lemerre, que se ha visto obligado a sustituir por lesión a dos de los jugadores que había traído a Alemania y mantiene la duda de su podrá alinear a su "estrella", el atacante de origen brasileño Francileudo Santos, autor de 18 goles en 28 partidos como internacional. Por eso, Lemerre ha llamado a un delantero Haykel Guemmadia, en sustitución de un defensa, el lesionado Mehdi Meriah.