Explicando su incidente con Cabello, el técnico local fue contundente asegurando que "en un equipo el líder es el entrenador, no ningún jugador. A los técnicos se nos paga por dirigir y a los jugadores por obeceder. Nunca me había mandado callar un jugador, la verdad es que me ha sorprendido. Pero no me va a volver a pasar más".

En cuanto al partido, se quejó de que el Jaén "sólo ha venido a defenderse y eso es más fácil. No han tenido ni una ocasión".