Lo ha tenido en secreto, con su habitual discreción, pero el teléfono de Gustavo Aranzana no ha dejado de sonar en las últimas semanas interesándose por su situación contractual como entrenador del Cáceres 2016. Entre estas llamadas, dos procedentes de la ACB: la del Blancos de Rueda Valladolid y la del Power Electronics de Valencia, actual campeón de la Eurocup. En ambos casos la respuesta fue la misma: hay un compromiso firmado con el Cáceres para la próxima temporada y no tiene previsto mover un dedo por desligarse.

La posibilidad de Valladolid ha sido la más tangible. Aranzana guarda buen cartel en su ciudad natal, en la que hace unas semanas parecía un hecho que Porfirio Fisac no cumpliría el año de contrato que le resta. Por eso los pucelanos se movieron a la búsqueda de un sustituto --Ricard Casas, Txus Vidorreta y Sergio Valdeolmillos eran los otros candidatos--, pero en los últimos días Fisac ha dado marcha atrás y todo hace indicar que seguirá.

Más apetitosa aparecía la opción del Power Electronics de Valencia, antiguo Pamesa. El campeón de la Eurocup y quinto clasificado de la ACB 2009-10 buscaba un técnico español experimentado que estuviese libre y llegó a preguntar por la situación de Aranzana, que se remitió de nuevo a su contrato. Finalmente, quien ocupará el puesto es un viejo conocido de la afición local, Manolo Hussein, que llevó al Cáceres CB en la temporada de su descenso (2002-03) y que llevaba un año sin entrenar tras dirigr al Murcia.