El kazajo Alexandre Vinokourov y el español Alejandro Valverde se vuelven a encontrar tras su duelo mantenido en la reciente Vuelta a España y ambos son el punto de referencia en el kilómetro cero del Mundial de fondo en carretera, que se disputará en un circuito de la ciudad austríaca de Salzburgo sobre 265 kilómetros.
Un desafío entre el primero y el segundo de la carrera española, que tendrá un escenario especial en la ciudad de uno de los genios de la música clásica como lo fue Wolfgang Amadeus Mozart, localidad que de está manera rinde un especial homenaje para conmemorar el 250 aniversario del nacimiento el celebre compositor.
Vinokourov interpretó en la Vuelta a España una de las mejores sinfonías de Mozart al llevarse los laureles de vencedor y relegando a un segundo plano a un Valverde que durante varias jornadas dio la impresión de que era él y lo suyos tenían la batuta de la orquesta, del pelotón.
El kazajo se llevaba los mejores aplausos de la obertura final y ahora quiere hacerlo en el mundial, prueba de la que no se ha cansado de repetir desde que al no dejarle correr el Tour de Francia al estar involucrados varios de los dirigentes de su anterior equipo en asuntos de dopaje, era el Mundial austríaco.
OTROS ASPIRANTES Un reto del que otros, a buen seguro, trataran sacar partida especialmente el italiano Paolo Bettini, campeón olímpico y de su país, que no terminó la Vuelta para centrarse en el mundial; lo mismo que hizo su compatriota Danilo di Luca que, junto a Luca Paolini componen del tridente de una las selecciones más potentes del campeonato.
En los pronósticos otro que también esta muy cotizado es el actual campeón el belga Tom Boonen uno de los especialistas en grandes clásicas, pues el mundial, aunque especial, no deja de ser una prueba de un día donde, además de estar bien física se necesita tener como aliado a la diosa fortuna.
También cuenta con un potente la selección germana centrado al servicio de unos de los mejores esprinters del momento como es Stefan Schumacher y otro de los últimos años como es Erik Zabel. La lista de candidatos al maillot arco iris la completan países de tradición ciclista como Francia, Bélgica, Holanda, Rusia, Australia y Suiza principal suelen animar la carrera y suelen ser los jueces de la misma.
Un mundial que se presenta un poco más abierto al faltar ilustres como Oscar Freire, ganador en tres ocasiones, pero con los mismo alicientes de los últimos años debido a la progresión de corredores como el español Valverde, el belga Boonen o el italiano Paolini y otros más veteranos como Bettini y Vinokourov se mantienen en un primer plano imponiéndose en muchas e importantes del calendario.
Los corredores inscritos son 198 corredores en representación de 42 países. El trazado es duro y exigente, especialmente en su parte intermedia con un par de repecho destacando el Elixhausen, un puerto de poco más de un kilómetro, con una altitud de 547 metros.
