BARCELONA. El vestuario se ha volcado con su técnico, Louis van Gaal, quien está siendo más cuestionado que nunca en su cargo, después de que dos jugadores más, Riquelme y Reiziger, hayan tendido la mano en un claro gesto para evidenciar que el Bar§a está cohesionado.

Mientras en el entorno de la entidad crece a diario el disgusto y aversión contra Van Gaal y el presidente de la entidad, Joan Gaspart, el técnico holandés, como mínimo, encuentra en sus futbolistas a los únicos que le defienden y manifiestan abiertamente su conformidad para que continúe. Riquelme ha mostrado con claridad cuál es su opinión acerca de la situación comprometida de Van Gaal: "Lo mejor es que ganemos al Celta".