La Atlética Gramenet pasó a formar parte de la historia negra del Barcelona en la Copa del Rey ya en la madrugada del miércoles al jueves. Los pupilos de Juliá García consiguieron emular la gesta protagonizada por el Figueres en 2002 y por el propio Novelda en 2003. Y ello pese a que el equipo colomense no atraviesa un buen momento, pues es quinto por la cola en el grupo III de Segunda División B.

Pero un detalle que no debe pasar por alto son los tintes extremeños del histórico triunfo de la Grama ´. Aunque la mayor parte de la gloria se la llevará el autor del tanto, Oscar Ollés, tampoco hay que olvidarse del impecable trabajo de los dos centrales del equipo colomense, que tienen raíces extremeñas para más señas: Emiliano Domínguez y Mario Carrizosa.

Trayectoria

El primero, aunque nació en Mérida, se considera montijano, donde reside su familia. El segundo procede de Azuaga. Emiliano jugó en el Mérida en dos etapas. En la primera, como jugador del Mérida Promesas; en la segunda, con la UD Mérida ya como abanderado del fútbol en la capital extremeña. Mario jugó primero en el Badajoz y después lo hizo en el Mérida.

Curiosamente, Emiliano y Mario ya coincidieron en el Mérida en la temporada 01-02 y el destino ha vuelto a unirles en el conjunto catalán.

Pero no queda ahí la cosa porque el guardameta Castilla jugó en el Jerez, Rubén Blaya en el Extremadura y el capitán Pons en el extinto CP Mérida SAD en la 98-99. Todos ellos vivieron el miércoles una noche inolvidable...también para los seguidores culés . Es la otra historia, la más cercana a Extremadura, del gran varapalo al líder de la Primera División.