El Extremadura Arroyo se exhibió ayer en el primer partido de la segunda vuelta de Liga FEV ante el hasta ayer líder imbatido, el Nuchar Tramek Murillo, de la Rioja, al que infligió su primera derrota del campeonato, por el resultado final de 3-1 (25-16, 18-25, 25-16 y 25-16). El equipo extremeño, liderado por las jugadoras nacidas en Arroyo de la Luz Loli Camisón y Gala Clemente, bien secundadas por la tripleta brasileña, Juliana Storti, Flavia Lima y Helen Silva, derrotó con contundencia a un equipo que llegó a la cancha cacereña contando por victorias sus triunfos.

Tal y como ha había adelantado durante la semana el técnico extremeño, Adolfo Gómez, las opciones de victoria para el conjunto arroyano pasaban por desarrollar, más que nunca, un juego "grupal, coral", sin fisuras, con determinación en defensa, un buen saque y las ideas muy claras en ataque, y así sucedió.

A excepción del segundo set, en el que la formación riojana se mostró netamente superior, el Extremadura Arroyo pasó como un rodillo por encima del líder, endosándole un severo correctivo, ya que en ninguno de los tres juegos que perdió fue capaz de pasar del punto 16.

Ante un pabellón repleto, a pesar de la gélida noche, y rendido a la excelencia del juego de las locales, éstas colapsaron todos y cada uno de los sistemas de juego del CV Murillo.

La dominicana Margarita Suero, la internacional ucraniana Oksana Zaporozhets o la brasileña Lilian Ferreira, que en el penúltimo punto del partido debió retirarse a causa de un esguince en su tobillo izquierdo, casi nunca pudieron evidenciar su categoría ante la homogeneidad del bloque de Gómez.

Tan sólo Esther Basurto en el saque y Victoria Orce en bloqueo y ataque a primer tiempo demostraron su valía, una circunstancia insuficiente para hacer frente al vendaval de juego arroyano, que contó en todo momento con el apoyo de su afición.

GRAN FINAL El primer set resultó el más disputado, con igualadas y alternativas en el marcador, hasta que tras el 14-13, el Arroyo logró un parcial de 7-1 (21-14) que dejaba el juego en franquía para las locales (25-16).

En la segunda manga, las jugadoras cacereñas supieron reaccionar al 2-8 con que se pusieron por delante en el electrónico las riojanas, hasta colocar el 9-8, pero de nuevo la eficacia del saque y su alto nivel de concentración en defensa en primera línea propició que el Nuchar Tramek se apuntara el parcial por 18-25

A partir de ese momento, las extremeñas se convirtieron de nuevo en una máquina perfectamente engrasada en todas las áreas de juego.