En 1985 Juan Gómez Juanito retaba a un jugador del Inter de Milán con una frase de esas que se queda en la memoria de todos los amantes del fútbol: «90 mininuti en el Bernabéu son molto longos». Aunque el italiano del genio malagueño era mejorable, su frase no podía ser más acertada en ese momento. Algo similar podría decir cualquier jugador del Villanovense a su próximo rival, porque 90 minutos en el Municipal de Villanueva son muy largos.

Que en cuatro de los últimos cinco partidos el Villanovense se haya hecho con el triunfo en los minutos finales no debe ser casualidad. El equipo de Ivan Ania tiene fe en la victoria y lo ha demostrado ante Cartagena, Badajoz, Betis B y Lorca. En los dos primeros la bota salvadora la metió Jacobo, mientras que en los dos últimos ha sido Tapia el que ha acertado desde el punto de penalti para sacar seis puntos que dejan a los de Villanueva de la Serena más cerca de los puestos de privilegio que de los de descenso, de los que parece alejado definitivamente. «Llevamos algunos partidos metiendo gol desde el 80 en adelante y creo que eso es fruto de la constancia del equipo, del trabajo, porque llegamos a los últimos minutos generando ocasiones y de ello que metamos goles en los últimos minutos», asegura Tapia.

El futbolista serón está viviendo uno de sus mejores años en Villanueva de la Serena. Es el jugador que más partidos ha disputado y más minutos lleva. Sólo se ha perdido un encuentro de liga por sanción y descansó en los de Copa Federación. Él ha sido el lanzador desde los once metros, algo en lo que siempre ha sido un especialista. De momento lleva tres goles desde ahí. «Al final es un trabajo de todo el equipo; bien es cierto que me ha tocado a mí asumir la responsabilidad con la suerte de meterlo. Pero también hemos tenido mala suerte en los penaltis; yo también tuve la desgracia de fallar uno el día del Murcia y creo que ni cuando se falla hay que crucificar a nadie ni cuando se mete y se consigue la victoria tampoco hay que ensalzar a nadie por los cielos», sentencia el jugador.

De momento, tanto él como sus compañeros ya sólo piensan en seguir sumando para llegar cuanto antes a los 45 puntos. Después quizá llegue el momento de pensar en otras metas. «Estamos muy contentos, pero con los pies en el suelo, sabiendo que tenemos 40 puntos. Hemos recorrido un largo camino, estamos muy bien y tenemos que seguir así y seguir hacia adelante», recuerda.

Para Tapia la clave en lo que resta de temporada es mantener el nivel de concentración de las últimas jornadas. Recuerda que se trata de un grupo igualado y que, a pesar de la distancia con sus rivales, nadie puede relajarse en lo que resta de liga. «Tranquilo en esta categoría no puedes estar en ningún momento porque con dos jornadas malas volvemos otra vez a la misma situación. Creo que hay que seguir manteniendo la misma concentración que en estos partidos”, recuerda el lateral serón.

Viejos conocidos

Por ahora, los serones volvieron ayer a los entrenamientos con la mente puesta en el partido del domingo ante la Balompédica Linense, el equipo que está por encima de ellos en la clasificación, con sólo un punto más. Un partido especial, ya que en frente estará un histórico en el banquillo serón, como es el extremeño Julio Cobos, y una cara más que conocida y admirada en Villanueva, la de Elías Pérez, que se marchó en enero a la Linea en busca de minutos.

Al Villanovense le quedan diez partidos para finalizar el campeonato, pero seis de ellos son como visitante (Linense, Recreativo, Melilla, Extremadura, Mérida y Marbella). Campos muy complicados. Las matemáticas no fallan y si se consiguen buenos resultados lejos del Municipal, la regularidad mostrada en casa puede ser la clave para otra temporada histórica en Villanueva.