Ganar el partido y mantener a cero su portería. Esa será la máxima del Villanovense para el partido que disputarán a las 6 de la tarde ante el Teruel en el Estadio Municipal Romero Cuerda. "Ganar el partido es lo más importante y si es sin encajar un gol, mejor que mejor", se expresaba ayer el técnico verdiblanco Domingo Suero. Sería la fórmula que permitiría encauzar esta primera eliminatoria y afrontar el encuentro de vuelta en Teruel con más tranquilidad.

Animos no les faltan a la plantilla, que ayer por la mañana realizó su último entrenamiento, como ha sido tónica habitual durante toda la temporada. Una sesión que transcurrió con normalidad pero con las dudas de dos importantes jugadores, el defensa Dani Fernández y el delantero Willy. Ambos han estado durante toda la semana entre algodones por las molestias que arrastran y de la que aún no se resienten, por lo que habrá que esperar a mañana para saber si finalmente podrán estar disponibles. No hay nervios, pero sí ansiedad por jugar. "Es más la motivación que tenemos que los nervios". Haber alcanzado esta eliminatoria es un premio al trabajo de todo el año, por lo que explica que "les he dicho que hay que disfrutarlo y no sufrirlo, y ponerles las cosas difíciles".

Saben que es un equipo difícil "porque a estas alturas todos los son". A juicio de Suero, es una plantilla con buena presencia física, con gente muy alta, y con buen manejo del balón. Y son conscientes de que deben aprovechar el factor casa para obtener un buen resultado. Por eso desde el club hacen un llamamiento a la afición para que acuda a apoyar al equipo. La primera cita será a la una de la tarde en el mesón La Catedral donde el club invitará a socios y abonados a una paella para animar las horas previas al encuentro.

Por su parte el Teruel llega con la duda de Vinuesa y acompañados por un autobús de aficionados.