El Villarreal afronta hoy (20.45, Canal Plus) el mayor reto de su historia: clasificarse para las semifinales de la Liga de Campeones, y para conseguirlo debe eliminar al Inter, objetivo que logrará si consigue marcar un gol y dejar su portería imbatida.
El gol marcado por el uruguayo Diego Forlán en San Siro, donde el Villarreal perdió 2-1, es el gran aval con el que cuenta el equipo español para dar la campanada en la máxima competición continental y meterse entre los cuatro mejores clubes del torneo, un logro inimaginable hace tan sólo unos años, cuando el conjunto castellonense dio el salto a la Primera División.
CON LO MEJOR Para este decisivo choque, el técnico Manuel Pellegrini contará con todos sus efectivos. Ha convocado a los veinte jugadores disponibles, a excepción del lateral derecho Josemi, quien llegó al club este invierno procedente del Liverpool inglés, club con el que jugó en la Liga de Campeones este año, lo que le imposibilita hacerlo con el Villarreal.
El preparador chileno dio descanso en la última jornada de la liga española a su jugador más desequilibrante, el argentino Juan Román Riquelme, así como al hispano-brasileño Marcos Senna y el lateral Javi Venta, a los que preservó ante sus molestias físicas, aunque ambos estarán en condiciones de jugar frente al Inter. Respecto a la ida, el técnico del Villarreal recupera a tres jugadores importantes como son Tacchinardi, Josico y Arruabarrena, quienes cumplieron en Milán un partido de sanción.
El portugués Luis Figo, ausente por una fuerte contusión en una pantorrilla en los últimos tres encuentros del Inter de Milán, será la gran novedad ante el Villarreal, en un partido decisivo para el pase a las semifinales y donde la duda interistas parece estar en el lateral izquierdo.
Figo ha participado con normalidad en las últimas sesiones preparatorias y ha entrado en la amplia convocatoria de un Inter que viaja consciente de que en tierras castellonenses deberá "dejarse el alma".
En Villarreal, lógico, no hay entradas. Es el gran día.
