Apenas 64 minutos duró la ilusión de Pablo Carreño en Indian Wells. En ese tiempo el tenista asturiano pasó de la alegría de haber alcanzado por primera vez unas semifinales de un Masters 1.000 a salir de la pista cabizbajo tras encajar una contundente derrota a manos de Stan Wawrinka, número 3 mundial, por 6-3 y 6-2. El suizo se enfrentará hoy en la final a Roger Federer que eliminó al estadounidense Jack Sock por 6-1 y 7-6 (7-4).

«Me marcho con sabor agridulce por el partido, pero no por el torneo. Empecé bien, jugándole de tú a tú, pero he ido perdiendo intensidad y al final hasta he dejado de luchar. Los últimos juegos han sido un desastre», admitía Carreño tras su derrota. La 15ª ante un top10, a los que sigue sin ganar de momento.

Wawrinka había ganado a Carreño en dos anteriores ocasiones (Oeiras, 2013 y Génova, 2016) pero se tomo el partido muy en serio, consciente de que el sturiano no había llegado a semifinales por casualidad, aunque la eliminación por la parte de su cuadro de favoritos como Andy Murray (número 1 mundial), el francés Jo-Wilfred Tsonga (7), el belga David Goffin (12) o la retirada de Roberto Bautista (16), le facilitaron el camino. La igualdad duró hasta el 3-3, pero en cuanto Wawrinka rompió el saque de Carreño (5-3), el suizo ya no dejó escapar su ventaja, y se apuntó el set en media hora. Después, en la segunda manga, acabó pronto con la última resistencia de Carreño para hacerle break en un duro segundo juego.