La Asociación Nacional de Importadores de Automóviles, Camiones, Autobuses y Motocicletas, (Aniacam) calcula que en torno al 10% de los concesionarios de España no vendieron ningún coche durante el mes de agosto. El mercado de turismos y todoterrenos registró en agosto una caída del 23,8% que se suma al descenso del 24,2% del pasado julio. Cifras que suponen "volver a los volúmenes de ventas que se registraban hace más de dos décadas, en los años 80, lo que pone en un grave riesgo la actual red de distribución de vehículos, dimensionada para un volumen muy superior", ha explicado el presidente de esta organización, Germán López Madrid.

La gran preocupación del sector es el fuerte retroceso del canal de particulares, que se sitúa por encima del 35% y con un volumen, 29.152 unidades, que "hace muy difícil la rentabilidad en las redes de concesionarios". Aniacam mantiene su previsión de 970.000 matriculaciones en el 2010, lo que llevará al sector a ver caídas similares a las de julio y agosto en lo que queda de año. En este sentido, López Madrid alerta de que "si no se recuperan los planes de ayuda al mercado, en el 2011 el mercado podría situarse por debajo de 850.000 vehículos, lo que provocaría un nuevo cierre de empresas y pérdidas de empleo. No debemos olvidar que hace solo unos años este sector suponía el 5% del PIB y el 11% del empleo y es clave para la economía española".

Por su parte, el canal de alquiladores creció en agosto, según lo previsto, por "la necesidad urgente de renovar las flotas después de un año absolutamente paralizado". El crecimiento del 77,1% en agosto enmascara, a juicio de Aniacam, el bajo volumen, solo 2.203 coches. En las zonas de costa este sector se vio golpeado duramente por el cierre de las pequeñas y medianas empresas. Finalmente, esta organización considera que el sector sigue afectado por la falta de financiación. "La valoración de riesgo ha subido porque las empresas que han desaparecido han mostrado una señal de alarma", señaló López Madrid.