Un total de veinte entidades financieras ya han concertado la línea extraordinaria de crédito del Instituto Oficial de Crédito (ICO) para capital circulante (dinero para funcionar) que entró en vigor el pasado 23 de diciembre y con la que el Gobierno pretende facilitar la financiación a las pequeñas y medianas empresas ante la crisis económica.

Esta línea pone a disposición de los autónomos y las pymes 10.000 millones de euros, 5.000 millones aportados por el ICO y 5.000, por las entidades de crédito. El importe máximo de financiación será de 500.000 euros por cliente y año, y la comisión será del 0,40%.