La mitad de los trabajadores del mundo, unos 1.400 millones de personas, no obtienen con su trabajo suficiente dinero como para superar, con el conjunto de su familia, el umbral de dos dólares al día, considerado el límite de la pobreza, según el último informe de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), hecho público ayer.

El estudio destaca que esta cifra de "empleos indignos y con sueldos indecentes" es una de las principales causas de la pobreza. El número de personas con estos empleos precarios es siete veces mayor que el de parados registrados en el mundo en el 2003 (185,9 millones de personas). No basta con un empleo para dejar la pobreza, sino que debe estar bien pagado, añade el informe.

Según el análisis, 2.800 millones de personas en todo el mundo contaban con un empleo el año pasado, la mayor cifra de la historia. Sin embargo, la mitad vivían con el equivalente a menos de dos dólares al día, y 550 millones, con menos de un dólar diario. El director general de la OIT, Juan Somavia, afirmó ayer que la creación de "empleos decentes y productivos" y la promoción de "una globalización más justa" son esenciales para reducir el número de trabajadores pobres.