España ha marcado un nuevo récord mundial. El 80% de los programas instalados en los ordenadores del país son ilegales algo que, según el Ministerio de Industria, supera con creces cualquier media de los estados desarrollada. Por este motivo, el Gobierno ha lanzado una campaña de concienciación entre los distribuidores y las empresas para el uso legal de los programas sujetos a licencia.

El director general para el Desarrollo de la Sociedad de la Información, David Cierco, presentó un estudio realizado por la consultora ICL para la Bussiness Software Alliance (BSA) en el que España queda muy mal parada respecto al uso sin licencia de estos programas. El 46% del software que se comercializa es ilegal, es decir, no respeta las licencias originarias del fabricante. Esto sucede porque cuatro de cada diez puntos de venta se dedica a distribuir este tipo de programas pirateados. Las tiendas del sur, noroeste, norte y centro son los que venden más software ilegal. Los que menos, las de Levante.