Ni siquiera los 9.000 puntos, que muchos analistas consideraban un soporte, es decir, una cota por debajo de la cual la bolsa no iba a caer, parecen asegurados. En la parte final de la sesión llegó a perder ese nivel. El mercado español de renta variable cayó ayer el 3,28%, el cuarto mayor descenso anual, con lo que encadenó un nuevo mínimo anual cerca de 9.000 puntos. Las cotizaciones se vieron afectadas por el retroceso en el resto de las plazas internacionales por el miedo a que se extienda la crisis de la deuda griega a otros países.

El índice de referencia del mercado nacional, el Ibex 35, perdió 306,50 puntos, equivalentes al 3,28%, hasta 9.046,10 puntos, nivel similar al registrado en mayo pasado. En la segunda peor semana desde octubre del 2008 la bolsa ha bajado el 13,78%, con lo que las pérdidas en lo que va de año llegan al 24,24%.

En el Ibex 35, solo el Banc Sabadell consiguió cerrar el día con ganancias, del 0,14%. El resto de los grandes valores cedieron terreno: Iberdrola cedió el 4,58%; Repsol, el 3,63%; el BBVA y Banco Santander, el 3,75% cada uno; y Telefónica cayó el 2,48%.

La mayor caída del Ibex correspondió a Iberia, que bajó el 7,69%, mientras que ArcelorMittal perdió el 5,82%; OHL, el 4,76%; Abertis, el 4,75%, seguida de Iberdrola, y de Abengoa, cuyos títulos registraron un retroceso del 4,57%. Banesto fue la empresa con menores pérdidas, el 0,12%, en el Ibex.

En el mercado continuo destacó la caída experimentada por Renta Corporación. Los títulos de esta compañía inmobiliaria se dejaron en el camino el 12,56%, mientras que de los seis valores con ganancias destacó Reno de Medici, cuyas acciones experimentaron una revalorización del 3,98%.

La rentabilidad de la deuda a largo plazo subió tres centésimas y se situó en el 4,43%, mientras el efectivo negociado en el mercado continuo rozó los 9.570 millones, de los cuales 4.600 procedieron de operaciones institucionales.