El comisario europeo de Asuntos Económicos y Monetarios, Joaquín Almunia, afirmó hoy que las turbulencias financieras provocadas por la crisis hipotecaria estadounidense podrían hacer bajar "unas décimas" el crecimiento de la zona euro en 2008, aunque el de este año no se verá afectado. Así lo aseguró Almunia durante una conferencia organizada por el Fórum Nueva Economía, en la que admitió que aún es pronto para analizar las consecuencias de esas turbulencias que, a su juicio, "se esperaban, aunque no se sabía cuándo", y pidió respeto por las decisiones de política monetaria que pueda tomar el Banco Central Europeo (BCE).

En este sentido, indicó que si cae la confianza de los agentes económicos y de los inversores "se alimentarán las tensiones proteccionistas y las cosas irán a peor". Por ello, subrayó que si se mantiene el respeto por el BCE y se despeja la incertidumbre de los agentes económicos, "esas turbulencias servirán de lección para no repetir errores".

Almunia afirmó que la posible influencia de esa inestabilidad en la economía europea dependerá del impacto directo que tengan las hipotecas y el mercado inmobiliario en Estados Unidos, que se puede manifestar en Europa a través de diferentes canales con un endurecimiento de las condiciones de financiación, "que no será de forma rápida y difícil". Sobre una posible subida de tipos por parte del BCE, manifestó que espera que la decisión que tome el banco emisor la haga "con el mismo acierto de siempre" y que nadie presione al BCE, sino que se le refuerce su confianza.

Respecto al próximo incremento de los precios de algunos alimentos en España, afirmó que es lógico que se produzca debido a su alta demanda y añadió que influyen muchos elementos en esa subida. En cuanto a la alta tasa del déficit comercial español, señaló que si bien es importante, ahora endeudarse en una moneda propia tiene más ventajas, ya que permite un mayor margen de maniobra para afrontar esas deudas.Además, incidió en que la inmigración ha sido "positiva" para la economía española, y abogó "por ver muchos más inmigrantes en puestos de responsabilidad, ya que si no, habrá tensiones en la sociedad".

En cuanto a la multa de 151,8 millones de euros impuesta por la Comisión Europea a Telefónica por abuso de posición de dominio en el mercado mayorista de la banda ancha, Almunia aseguró que se siente "reflejado" en esa decisión y que es "solidario" con ella.

"Cómo van a financiar sus promesas electorales"

El comisario se refirió a la cercanía de las elecciones generales en España y pidió que el "calentamiento" de las posible promesas, no genere un "calentamiento" de la economía que pueda afectar a su crecimiento y sostenibilidad, por lo que solicitó a los partidos políticos "que expliquen muy bien cómo van a financiar sus promesas electorales y cuáles van a ser sus consecuencias". Así, sobre el anuncio del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, de ampliar el permiso de paternidad, Almunia se mostró a favor "de debatir sobre mejoras instrumentales para recuperar el equilibrio demográfico".

Asimismo, respecto a la promesa de Zapatero de subir las pensiones mínimas el doble que el resto, destacó que éstas "se financian con dinero procedente de los impuestos y no con recursos del propio sistema contributivo de la Seguridad Social, y no afecta a la sostenibilidad a medio y largo plazo del sistema contributivo de pensiones, que tiene una posición envidiable y que aumenta año tras año". Además, abogó por el superávit presupuestario, "que no es un lujo sino una necesidad", y añadió que sería un error que por motivos electorales no se respetara.

Respecto al nuevo Tratado Constitucional europeo, "que entrará en vigor a mediados de 2009", reconoció que le falta parte del "impulso político" del anterior y subrayó que "su grado de ambición no va a ser el mismo". Almunia también defendió la entrada de Turquía en la Unión Europea siempre que cumpla las condiciones y los requisitos exigidos y auguró que habrá un proceso negociador "muy largo". También intervino en el foro el vicepresidente del Gobierno y ministro de Economía, Pedro Solbes, quien ensalzó la labor de Almunia y su trabajo "con gran honestidad y elegancia".