El fiscal del caso Gescartera considera que tres millones de euros (500 millones de pesetas) es una fianza "proporcionada" para que el propietario de la agencia de valores, Antonio Camacho, pueda salir de la cárcel, dado que, "indiciariamente", cuenta con los fondos suficientes al ser uno de los responsables del desvío de millones de euros.
Así lo señala la Fiscalía Anticorrupción en un informe remitido a la Audiencia Nacional, en el que se muestra favorable a que la prisión provisional de Camacho y de Aníbal Sardón --comercial de Gescartera-- se atenúe por la de prisión eludible mediante fianza, que en el caso de éste último sería de 1,5 millones. El fiscal opina que las fianzas son proporcionadas y disuasorias para que ambos imputados no traten de eludir la acción de la justicia.
El juez precisa que la causa se encuentra "avanzada", lo que a su juicio "disminuye la posibilidad de alteración u obstrucción" por parte de Camacho y Sardón si quedan en libertad. Señala también que en el actual momento procesal se encuentra "reducido el riesgo de fuga".
No obstante, el ministerio fiscal no comparte las valoraciones que se hacen sobre la inocencia del comercial de Gescartera. El fiscal manifiesta que, a su juicio, las pruebas, lejos de acreditar la inocencia de Sardón, "se pronuncian en términos contundentes, que confirman la existencia de indicios de la comisión de delito y que en su momento el Tribunal deberá valorar".
EN PRISION
Actualmente, sólo Camacho y Sardón permanecen en prisión por el caso Gescartera --el primero, desde julio del 2001, y el segundo, desde el 11 de noviembre del 2002--, una vez que la presidenta de la agencia, Pilar Giménez-Reyna, y el asesor fiscal Julio Rodríguez Gil, fueron puestos en libertad provisional.
Recientemente, la Fiscalía Anticorrupción ha recibido una denuncia de la asociación Reagrupamiento de los Accionistas de Banesto contra la dirección de la entidad, por considerar que pudo cometer un delito societario al dar información "falsa" en las dos últimas juntas.
Según la denuncia, la presidenta del banco, Ana Patricia Botín, informó en la junta de accionistas del pasado mayo que el principal accionista, el SCH, preveía vender el 10% del capital a final del 2002.
