Apag-Extremadura tiene previsto comenzar una ronda de contactos con el resto de las organizaciones profesionales agrarias de la región para plantearles la posibilidad de comenzar de forma conjunta una serie de medidas de presión para que la Junta "deje de ser la defensora del Gobierno del PSOE y defienda a los agricultores extremeños" respecto a la negociación de las OCM del tabaco y del olivar.

Así lo asegura en un comunicado el presidente de la organización, Bibiano Serrano, que muestra su malestar porque en la reciente visita de la ministra de Agricultura, Elena Espinosa, a Extremadura no se reunió con las organizaciones agrarias, mientras que en otras comunidades sí lo ha hecho. "No sabemos si es que menosprecia a las organizaciones extremeñas o es que no tiene nada que contarnos, a pesar de la importancia que las últimas negociaciones tienen para el campo extremeño", valora.

En este sentido, añade que la ministra "ha desaprovechado una ocasión de oro de explicarnos en vivo y en directo la bondad que pregona de estas OCM y que nosotros no vemos por ningún lado", y le exige que explique cuáles son las alternativas que plantea al cultivo del tabaco a partir de 2010, cuando desaparezcan el 50% de las ayudas, y pide que este dinero que va a perder el sector "no se dedique a practicar la política de la farolita, de embellecer las calles,sino que se destine al famoso plan que va a poner en marcha para que este cultivo no desaparezca".

Respecto a la OCM del olivar, Serrano tacha de "cobardes" al presidente de la Junta, Rodríguez Ibarra, y al consejero de Agricultura, José Luis Quintana, porque a su juicio no defienden los intereses del sector agrario extremeño al no pedir públicamente la ayuda de 300 euros por hectárea para el olivar extremeño, al contrario de lo que están haciendo la Junta de Andalucía, que está ejerciendo una importante presión.