El Gobierno de Argentina desestimó ayer la posibilidad de que los bienes del Estado sean embargados para pagar la deuda a los acreedores privados. El ejecutivo que preside Néstor Kirchner argumentó que "hay normas de carácter internacional que favorecen la posición argentina y prohíben" la incautación de propiedades del país.

El juez de Nueva York Thomas Griesa decidió el jueves aplazar hasta final de mes la decisión sobre la ejecución de varios fallos que, de aplicarse, implicarían el embargo de bienes argentinos en el exterior. Estos fallos benefician a los fondos estadounidenses Old Castle Holdings, Lightwater, Macrotecnic y EM, que recibirían 800 millones de dólares.