Mientras los tribunales y las autoridades de EEUU intentan esclarecer el escándalo de Bernard Madoff, que ha dejado un agujero potencial de 34.700 millones de euros, han empezado a aflorar réplicas del fraude. En las últimas 48 horas han sido arrestados dos inversores sospechosos de timos.

El lunes se entregó Nicholas Cosmo, un inversor de Nueva York que ha perdido entre 106 y 303 millones de euros de pequeños inversores. Ayer, la policía arrestó en Florida a Arthur Nadel, un asesor de hedge funds que decía manejar 227 millones de euros cuando sus fondos sumaban un millón.